• Muchos se aguantan lumbalgias, contusiones o heridas.
J. L. OBRADOR. 02.03.2010
Para el presidente de la Comisión de Organización y Planificación del Colegio de Médicos de Valencia, José Baeza, las causas principales que explican este fenómeno son "el aumento del desempleo y el clima de inestabilidad laboral" actual. De hecho, muchos trabajadores "no van al médico por miedo a cogerse la baja" y que ello les provoque problemas.
En esta línea, las que más se han reducido han sido las de tipo leve: lumbalgias por sobreesfuerzos, contusiones y heridas sin sutura se disimulan ahora, cuando hace un año se notificaban de un modo más generalizado.
Así, las bajas por accidentes de trabajo leves representan el 98,9% del total y han sido las responsables del desplome registrado en 2009 en las tres provincias de la Comunitat Valenciana. Las más graves, que conllevan intervenciones, no han bajado tanto.
La drástica caída en el número de bajas también ha provocado un descenso en la demanda de médicos de trabajo, sobre todo en el área de traumatología. Esta cadena de acontecimientos, unida al impacto directo de la crisis económica, ha acabado repercutiendo en los presupuestos de las mutuas laborales, que son entidades privadas que gestionan dinero público del Ministerio de Trabajo e Inmigración.
El ladrillo copa aún los siniestros
El sector de la construcción ha sido el que más ha notado el desplome de bajas en 2009, pero sigue al frente en cuanto a volumen de accidentes de trabajo. Los datos de la Seguridad Social arrojan un balance de 8.806 notificaciones en la Comunitat entre construcción de edificios y otras actividades del sector, frente a las 18.528 del año anterior. Le siguen los sectores de comercio, agricultura, administración pública y servicios de comidas y bebidas.
El ir enfermo al trabajo aumenta los riesgos de sufrir un accidente laboral, además de arriesgarse a empeorar o agravar la dolencia con la que se acude al trabajo.
ResponderEliminarEs necesario enfrentarse a un sistema que no está al servicio del hombre y que lo convierte en un mero instrumento de producción... y así nos vá.